La temperatura del vino es muy importante para disfrutar plenamente de su sabor, cualidades y propiedades. Dependiendo del tipo de vino que vayamos a consumir, será más aconsejable una u otra temperatura, pues no es lo mismo un vino tinto de reserva que un vino rosado.
A continuación, os dejamos las temperaturas que consideramos óptimas para el consumo de cada tipo de vino:
TIPO DE VINO | TEMPERATURA ÓPTIMA |
Cavas y champagnes: | 6º |
Vinos blancos: | 10º |
Vinos rosados: | 10º |
Tintos jóvenes: | 10º |
Tintos crianza: | 14º |
Tintos reserva: | 16º |
Vinos dulces: | 10º |
Vinos generosos: | 12 |
¿Qué pasa si tomamos el vino muy caliente o muy frío?
- Un vino a más de 20 ºC, se percibe con los sabores dulces y los alcoholes mucho más potenciados.
- Un vino entre 2ºC y 4ºC se percibe con los sabores ácidos y ausente de aromas.
Es importante saber que los vinos rápidamente cogen temperatura “ambiente” y esta suele ser alta, por lo que, si el vino se consume por botellas, es preferible servirse poco de cada vez en la copa para que no se caliente.
Sugerencias para calentar o enfriar una botella de vino
- Totalmente desaconsejado meter la botella de vino en el congelador para enfriar antes, podemos echar a perder las cualidades del vino.
- Asimismo, también se desaconseja acercar una botella fría en exceso a una fuente de calor, los cambios de temperatura bruscos tanto en exceso como por defecto, pueden mermar el vino.
- Para atemperar un vino, la mejor opción es introducir la botella en un recipiente con agua y hielo durante unos minutos. Se trata de la forma más rápida para enfriarlo y la que menos daña el vino.
En resumen, las cualidades de cada vino se aprecian al consumirlo a la temperatura óptima, por lo que su conservación y tratamiento antes de tomarlo, es clave para un consumo correcto y satisfactorio.